“Hay una plenitud de disminución en toda civilización demasiado madura. Los instintos se flexibilizan; los placeres se dilatan y no corresponden ya a su función biológica; el placer se convierte en fin en sí mismo, su prolongación en un arte, el escamoteamiento del orgasmo en una técnica, la sexualidad en una ciencia. Procedimientos e inspiraciones librescas para multiplicar las vías del deseo, la imaginación torturada para diversificar los preliminares del gozo, el mismo espíritu mezclado con un sector extraño a su naturaleza y sobre el cual no debería tener ninguna garra, son otros tantos síntomas de empobrecimiento de la sangre y de intelectualización mórbida de la sangre.”
Emile Michel Cioran. “Breviario de podredumbre.”